Según el secretario de Proyecto Hombre, Modesto Salgado, la edad de inicio en el consumo de cocaína ha bajado hasta los 16-17 años, mientras que el de alcohol y hachís se sitúa en los 14-15. Unos datos preocupantes y que, en el caso de la cocaína, "generan un montón de problemas familiares", ha reseñado. Las personas integradas en ese programa de tratamiento ambulatorio acuden dos tardes a la semana y se trabaja con ellos "toda la problemática que les ha llevado a crear la adicción".
En general, la media de consumo de las personas a las que se trata de ayudar está entre 7 y 10 años. Los adictos se quedan estancados "en una adolescencia eterna" en la que les cuesta resolver los problemas de la vida y de donde se trata de ayudarles a salir. Para eso, también es vital el trabajo en grupos de autoayuda en los que los adolescentes reconozcan sus problemas en gente de su misma edad.
"El perfil actual del consumidor de drogas es varón estudiante entre 16 y 25 años y convive con sus padres", ha detallado Guarinos, aunque aumenta paulatinamente entre las mujeres hasta casi equipararse. La presidenta subraya que acciones como las de Proyecto Hombre "tienen más valor que nunca […] porque estamos atravesando por momentos muy complicados desde el punto de vista social". En Guadalajara, la acción de la ONG se extiende en total a unas 150 personas, de las cuales un tercio se encuentra en régimen de internamiento en la finca de Castillejos, normalmente porque su situación personal se ha deteriorado mucho. "Han perdido trabajo, familias y están muy desestructurados", comentaba Salgado.
Por eso, Salgado recuerda la importancia del "trabajo preventivo". "Que las familias aprendan a poner unos límites" a sus hijos y, también, a dialogar con ellos. En ocasiones esto no se produce y hay padres que llaman angustiados a la organización al descubrir que su hijo consume algún tipo de sustancia de forma abusiva.
400.000 euros menos en el presupuesto
A nivel económico, Salgado ha agradecido a la Diputación que mantenga su ayuda. Guarinos ha prometido ampliar la colaboración "si las posibilidades nos lo permiten"; por ejemplo repitiendo con otro convenio que se firmó también el año pasado y que entregaba 20.000 euros para luchar contra la adicción al alcohol.
Desgraciadamente, a nivel general las aportaciones han disminuido. "El año pasado recibimos unos 400.000 euros menos", ha lamentado el secretario de Proyecto Hombre que, con todo, ha mostrado su satisfacción por que no se haya cerrado ninguno de los programas que mantienen activos en la ONG, aunque si ha habido recortes de personal y sueldos. Se intenta que las familias o los adictos realicen aportaciones voluntarias para financiar los programas, pero la situación económica de muchas de ellas hace que apenas el 50% lo hagan.
